Calle Pablo Neruda, 45, 41927 Mairena del Aljarafe
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Crecer en una familia dedicada a la hostelería es hacerlo entre aromas, conversaciones y una manera de entender la vida que trasciende el oficio. En el caso de Toni González, ese aprendizaje comenzó muy pronto, en la Venta Pilín, el histórico establecimiento fundado en 1918 por su bisabuelo, Feliciano González Pacheco “Pilín”, banderillero del torero Juan Belmonte. Desde entonces, la venta se convirtió en un punto de encuentro donde la tradición y el buen hacer se han transmitido de generación en generación. Allí, entre fogones, mesas y clientes de toda la vida, Toni fue absorbiendo los pilares del negocio: la constancia, el trato cercano y la fidelidad a los sabores auténticos. De la mano de su padre, y volcado en el mundo de la restauración, desarrolló una visión propia, actual, pero siempre fiel a lo que ha distinguido a su familia: la honestidad del producto y el valor del trabajo bien hecho. Con el tiempo, esa base sólida se transformó en impulso. Tras dedicar media vida a la Venta Pilín, de la que sigue siendo propietario, Toni decidió en junio de 2021 emprender un nuevo camino junto a su esposa Nani y sus dos hijos, dando vida a La Unión. Un espacio donde todo lo aprendido se reinterpreta con una mirada contemporánea, sin perder la esencia que ha acompañado a su apellido durante más de un siglo.
El interior de La Unión esta bien aprovechado, con mesas de madera alineadas en paralelo que invitan a la conversación cercana. El suelo de terrazo moteado y las paredes pintadas en blanco con un zócalo verde y molduras marrones crean una atmósfera sencilla y funcional. La iluminación es suave, con apliques de pared que proyectan luz cálida sobre los comensales. En el fondo, pequeños detalles decorativos como corazones y plantas estratégicamente colocadas aportan un aire festivo y casero. Una televisión de pared completa el conjunto, reforzando el carácter de bar de barrio donde se viene tanto a comer como a compartir. Al salir al exterior, la terraza se despliega junto a un parque infantil rodeado de árboles, en plena Plaza de la Virgen de Mairena. Los veladores y las sillas de plástico negro se distribuyen sobre el albero, bajo la sombra generosa de los árboles. Este espacio abierto y natural se convierte en un refugio urbano donde la gastronomía se mezcla con la vida cotidiana: los niños juegan a pocos metros, las familias se relajan sin perder de vista a los pequeños, y el entorno vegetal aporta frescura y calma. La terraza no es solo una extensión del local, sino una plaza vivida, un punto de encuentro vecinal donde La Unión se convierte en parte del paisaje emocional del barrio.
La carta de La Unión refleja una cocina andaluza moderna con raíces tradicionales, con los sabores de siempre y una presentación actual. Entre los entrantes tenéis chicharrón de Cádiz (tapa 4,9€), ensaladilla (3,50€), ensalada César (9€), ensalada “Estrella” (10€), papas bravas (5,4€), papas arrugás con mojo (3,5€), milhojas de berenjena y queso de cabra (4,5€), queso camembert frito (3,9€), twister de langostinos (3,5€) y cóctel de marisco versión La Unión (6€). En el apartado Entre Panes, destacan el montadito de gambas con alioli (3,5€), serranito de pollo o lomo (6€), serranito de presa ibérica (8€), serranitos a otro rollo (4,5€), burger huevo (retinto 200gr), burger cheddar (Retinto 200 g) (9,5€), burger chicken (8€), brioche de carrillada y queso camembert (6€). En A fuego lento, se ofrecen carrillada al Pedro Ximénez (4,9€), solomillo al whisky (4,5€), solomillo a La Unión (4,5€) y solomillo “pata negra” (5,5€). En el apartado A la brasa, figuran el abanico ibérico (6,00€), lagartito ibérico (6€), chorizo criollo (8€), churrasco de cerdo y de pollo (8,5€). La sección Empanadisimo incluye croquetas de puchero, de huevos fritos con chorizo y de gambón al ajillo (3,80€), lagrimitas de pollo (8€) y el flamenquín argentino (7,90€). De la mar, aparecen taquitos de merluza al limón (4€), adobo (4,5€), buñuelos de marisco (4,5€), chocos fritos (4,5€), pescada a la plancha (7,5€), atún a la plancha (11€), pez espada a la plancha (12€), chipirón a la plancha (11€), gambas al ajillo (8,5€) y tacos de camarones (10,5€). Bajo el apartado Déjate endulzar, destacan la torrija caramelizada con helado de vainilla praliné (5,9€), cheesecake de dulce de leche (5,5€), tarta de Ferrero Rocher (5,9€), “Pecado Mortal”, el postre estrella (5,9€), tarta de chocolate blanco y crema de pistachos (4,5€) y tarta Lotus (4,5€).
Hay proyectos que nacen de una idea, y otros que se forjan con años de trabajo y experiencia. En el caso de Toni y Nani, cada rincón de La Unión habla de ese camino hecho a base de constancia, autenticidad y cariño por las cosas bien hechas. Su cocina rescata los sabores de siempre, los adapta al presente y los sirve con sencillez y honestidad. El resultado es un lugar donde se come a gusto, con precios razonables, nuestra comida para dos, 32 €, y un ambiente que invita a quedarse un poco más. Al final, el verdadero logro de Toni y su mujer no está solo en lo que llega a la mesa, sino en haberse atrevido a seguir su propio camino, manteniendo viva una herencia hostelera y dándole su propio sello, con el sabor inconfundible del esfuerzo y la dedicación diaria. Y nosotros estamos encantados de echarles una mano en ese camino. Tenéis que conocerlo.
